MI HIJO NO ME CUENTA NADA

Mi hijo no me cuenta nada, ¿qué hago? Descubre qué debes hacer para iniciar muchas conversaciones

La comunicación entre padres e hijos puede a menudo parecer un laberinto emocional, donde el entendimiento se encuentra con obstáculos de incomunicación. Los padres a menudo se encuentran en un dilema peculiar: el anhelo de conocer los pensamientos y experiencias de sus hijos. Convirtiendo esto en una de las preocupaciones más comunes de los padres.

Cuando un hijo o hija no comparte sus experiencias, pensamientos o preocupaciones, los padres se sienten desorientados por entender el motivo de este silencio.

Los errores más comunes por los que tu hijo no te cuenta nada

En general, los padres y madres solemos caer en el error de realizar a nuestros hijos e hijas el mismo tipo de preguntas.

“¿Cómo te fue el día?”
“Bien.”

“¿Que aprendiste hoy?”
“Nada.”

“¿Con quién jugaste en el recreo?”
“Nadie.”

Sin embargo, las respuestas de una sola palabra no promueven una conversación efectiva. Y, realmente, no facilitan la reconexión con nuestros hijos después de una jornada separados. Es imperativo entender que reconectar es esencial, ya que la falta de ello puede acarrear consecuencias más adelante.

El problema radica en las preguntas con respuestas de una sola palabra. Por lo que hay que procurar hacerles preguntas con respuestas de más de una palabra. Esto facilita conversaciones familiares significativas. Estas interacciones no solo facilita la conexión de todos, sino que también fortalecen el vínculo saludable entre padres e hijos.

Sin embargo, como padres ocupados, a menudo nos encontramos agotados para desplegar la creatividad necesaria en la formulación de preguntas. Sobre todo, de preguntas que promuevan conversaciones auténticas y significativas con nuestros hijos.

Las mejores preguntas para que tu hijo te cuente todo

Las preguntas abiertas, como aquellas que comienzan con “Cómo” y “Por qué”, suelen ser más efectivas con los niños. Ya que invitan a respuestas que van más allá de una sola palabra. Por el contrario, preguntas como “¿Cuál es tu color favorito?” o “¿Cuál es tu conjunto favorito?” no suelen propiciar conversaciones profundas. Es importante que las preguntas dirigidas a los niños sean también relevantes para los adultos. Evitando hacer que los niños se sientan presionados a actuar como meros entretenimientos para los mayores. Al fomentar una conversación en la que todos participan, se genera un ambiente más enriquecedor y divertido para todos los involucrados.

También es importante que las preguntas que les formulemos a nuestros hijos e hijas no sean como un cuestionario de Tivial. Ni tampoco, que sienta que les estamos poniendo a prueba o a punto de soltarles un sermón. Por ejemplo, preguntas como “¿Por qué crees que algunos niños desobedecen a sus padres?”

Las 100 mejores preguntas para hacer a tu hijo

Por eso, he preparado y diseñado las mejores preguntas para hacer a tu hijo o hija. Al utilizar estas preguntas para niños, no solo estaréis generando conversación, sino que también establecerá conexión. Ya que van más allá de las típicas preguntas sobre películas, juguetes o ingredientes de pizza favoritos. Para formular preguntas sobre lo que realmente importa para ellos, sus preocupaciones y sus pasiones más profundas.

Estas preguntas son adecuadas para una amplia variedad de edades, desde niños pequeños hasta adolescentes y más. Ofrecen una mezcla entre preguntas lúdicas y otras que invitan a la reflexión. Abordando una variedad de temas de conversación significativos que seguramente te llenarán de alegría al escuchar las respuestas.

Además, todas estas preguntas que inician conversaciones con nuestros hijos e hijas, fomentan su autoestima al sentirse escuchados y valorados.

Cuáles son las 100 mejores preguntas

Las 100 mejores preguntas para hacer a tu hijo son una valiosa herramienta para fortalecer el vínculo familiar y profundizar la comunicación. Estas preguntas están diseñadas para abarcar una amplia gama de temas. Desde los intereses y pasatiempos de los niños hasta sus sueños y preocupaciones más profundos. Al plantear estas preguntas, los padres no solo fomentan la expresión de los pensamientos y sentimientos. Sino que también demuestran interés genuino en su mundo interior, creando así un ambiente de confianza y conexión emocional.

Cada pregunta de esta lista ofrece una oportunidad para explorar la mente y el corazón de tu hijo, permitiendo que surjan conversaciones significativas y gratificantes. Desde preguntas simples que despiertan la imaginación hasta otras más reflexivas que invitan a la reflexión. Estas preguntas para niños pueden convertirse en el punto de partida para profundizar en la comprensión mutua y fortalecer los lazos familiares.

• ¿Qué es lo más divertido que te ha pasado?
• Cuéntame algo que te gustaría hacer, pero no puedes
• Si no tuvieras que dormir, ¿qué harías con ese tiempo?
• Si fueras un superhéroe, ¿qué super poder tendrías?
• Si enterraras un cofre del Tesoro, ¿qué pondrías dentro?

Estas son solo algunas de las preguntas con las que puedes generar todo tipo de conversaciones con tu hijo o hija. Y con las que acabaréis hablando de todo. Incluso, surgirán temas del cole que no te había llegado a contar o había olvidado. Porque, una vez, comenzado a hablar la conexión ya está hecha y todo va surgiendo. Y dejará de preocuparte lo de mi hijo no me cuenta nada.

Mi hijo no me cuenta nada, ¿cómo solucionarlo?

Si estás en esa situación de mi hijo no me cuenta nada, te recomiendo que te hagas con estas 100 preguntas. De esta manera, te ahorro tiempo de pensar y buscar las preguntas adecuadas. Ya que con esta selección de 100 preguntas, encontrarás preguntas divertidas y otras que invitan a la reflexión.

Cuándo hacer estas preguntas a tu hijo

Aquí se presentan algunas situaciones ideales para hacer estas preguntas a tus hijos:

1. Elige una o dos preguntas para plantear durante la cena cada noche, y luego toma turnos para responderlas. Prepárate para sentirte más cercano a tu hijo que nunca antes.
2. Guarda tus tarjetas en el coche y aprovecha el camino de ida o vuelta del colegio para hacer una pregunta.
3. Establece una cita semanal individual con tu hijo/a, comiendo helado u otro postre favorito mientras os hacéis preguntas.
4. Si tienes una tradición familiar semanal, como noches de juegos o noches de películas, comienza la noche planteando una o dos preguntas de la lista. Durante las noches de juegos, estas preguntas funcionan especialmente bien como distracción.

Últimos consejos sobre las mejores preguntas para hacer a tu hijo

Prueba simplemente a escuchar. Con algunas de estas preguntas para niños, puede que te sientas tentado a intervenir y proporcionar la respuesta “correcta”. Sin embargo, tu hijo aprenderá mucho más de una discusión saludable que de una conferencia unidireccional. Para los niños pequeños y preescolares, puede ser más efectivo permitir que el pequeño vaya primero. Ya que de lo contrario podría simplemente repetir lo que dijo el anterior.

Si tu hijo responde con un “No sé”, explícale que no hay una respuesta correcta o incorrecta, solo quieres escuchar sus ideas. Pero si así no tiene una respuesta, puedes decirle: “Puedo darte un minuto y volveré contigo”. Y luego pasar a la siguiente persona en el auto, en la mesa, y así sucesivamente. Si la respuesta de tu hijo te sorprende, intenta responder con un simple “Hmm” o “Interesante. Es decir, algo que te dé tiempo para pensar en una respuesta tranquila. Porque si asustas a tu hijo, se callará. Estas conversaciones deben ser divertidas, no estresantes.

Mi hijo no me cuenta nada. Conclusiones

Espero que estas 100 preguntas para hacer a tu hijo o hija, os proporcionen grandes conversaciones. Gracias a estas preguntas podréis hablar de muchos temas, descubrir cosas de tu hijo y él de ti y reflexionar sobre otras. Además, fortaleceréis el vínculo y la conexión entre padres e hijos. Así que disfrútalas porque os servirán durante años, adaptándose a las diferentes edades de tu hijo o hija.