Las visitas al médico con los niños son desagradables, lo sabemos. No sólo por el malestar que nos haya llevado hasta allí, sino también por el miedo y temor que éste produce en nuestros hijos. Mi chiquitina también se preocupa mucho cuando tenemos que ir, hay momentos en los que llora o se niega. Por eso he tenido que ir pensado la manera de que ir al médico fuese una experiencia lo más llevadera posible para ella. Así que aquí os dejo mis tips para preparar la visita al médico. Y que dé un poco menos de miedo.
Lo primero que hago es anticiparme y avisarle con un poco de antelación que vamos a ir al médico. Tampoco con demasiado tiempo porque eso alargaría su preocupación y sufrimiento. Casi siempre me pregunta porqué tenemos que ir o si le van a hacer algo que le vaya a doler. Esas son las grandes preocupaciones de los niños: el temor a lo desconocido y el miedo al dolor. En mi caso le suelo explicar de manera sencilla y sin darle mayor importancia porqué vamos y qué va a suceder. Procuro no ocultarle nada, mi chiquitina se sentiría engañada y me lo acabaría reprochando. Ella se suele angustiar pensando en algún trámite del reconocimiento que le resulta desagradable o incómodo. Pero prefiero ser sincera y ayudarla de antemano buscando la forma en la que se pueda sentir mejor cuando hay que ir al médico.
La sala de espera es otro lugar importante y el entretenimiento aquí es fundamental. No sólo por el evidente aburrimiento en la espera, sino también para distraerles del lugar en el que se encuentran. Más allá de las pantallas en las que nadie interactúa con ellos, os recomiendo que llevéis juegos o materiales que os permitan divertiros juntos y le permita hablar, reír, para liberar tensiones. Un mini tangram, un 3 en raya, libreta y lápices, libros, cartas, mini botes sensoriales, lo que necesitéis en función de la edad e intereses de vuestros peques.
La personalización de la bata blanca
Personalizo al médico, es decir, si es su pediatra habitual la menciono por su nombre, haciéndola así mas cercana. Y le digo que le puede explicar a ella todo lo que le preocupa. Por ejemplo, a mi chiquitina le molesta cuando le revisan los oídos y en nuestra última visita, ella solita le dijo: “Por favor, flojito que me duele”. En ese momento me sentí muy orgullosa de ella, de cómo afrontaba ese temor expresándolo tal y cómo le había recomendado.
Si por el contrario no conocemos al médico, por lo general ya suelen tratar a los peques por sus nombres, aunque la mayoría se olvida de presentarse. Así que si la veo muy recelosa, invito al profesional a que se presente. La personalización de esa bata blanca les ayuda muchísimo.
Siempre solemos llevar un muñeco, un bebé habitualmente, que resulta ser también otro “paciente” más en nuestra visita al médico. De esta manera todo lo que vayan a hacerle a mi hija, también se lo van a hacer al muñeco. Hasta el momento no me he encontrado con ningún profesional que se haya negado, y tenemos muñecos a los que incluso les “han puesto” vacunas. Ella se siente mucho más acompañada e incluso llega a dejar de lado su propio miedo, para cuidar a su muñeco e interpretar el papel de mamá.
Respeto mutuo
Desde el respeto hacia el profesional y su trabajo, procuro que el trato hacia mi hija sea igualmente respetuoso y que en ningún momento desmerezcan sus emociones y sentimientos. De manera conciliadora y amigable suelo redirigir cualquier tipo de comentario, cuando se han dado, hacia el respeto a mi hija. Y nunca hay que olvidar que nosotros somos quiénes mejor conocemos a nuestros hijos, así que somos aquellos que podemos ayudar a que el trabajo del sanitario sea lo más fácil y cómodo posible.
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¿Qué os han parecido estas ideas para ir al médico con niños? ¿cuáles ponéis en práctica vosotros para preparar la visita? Os leo, porque entre todas aprendemos y crecemos. Gracias y mientras os espero en mi día a día en Instagram.
3 comments
Me han gustado mucho,yo la verdad que no hago nada de eso les digo la verdad y ya está ,la mayor siempre ha ido bien y el pequeño va bien hasta que entramos dentro de la consulta ,😂😂😂😂
Muy interesante. Sobre todo, para los peques que vamos a mil especialistas y luego tienen pesadillas con ellos.
[…] asegurada no sólo en casa, sino también en la sala del médico (como os recomendé en este post), en un restaurante, de viaje. Por eso hoy os enseño todas las propuestas que hemos ido haciendo […]